Wolfgang Amadeus Mozart fue admitido con grado de aprendiz en la logia masónica de Viena llamada Zur Wohltätigkeit (“Beneficencia”) el 14 de diciembre de 1784. Fue promovido al grado de compañero masón el 7 de enero de 1785 y se convirtió en maestro masón “en un corto espacio de tiempo”. Para el 22 de abril de ese mismo año, Mozart figura ya como maestro masón en los archivos de la logia. Mozart también asistió a las reuniones de otra logia, llamada Zur wahren Eintracht (“Concordia verdadera”). Ambas logias practicaban el Rito Zinnendorf. Según Otto Erich Deutsch, esta logia era “la mayor y más aristocrática de Viena. … Mozart, como el mejor de los ‘hermanos’ músicos, fue bienvenido en todas las logias”. Fue apadrinado por el naturalista Ignaz von Born.

La propia logia de Mozart Zur Wohltätigkeit se consolidó con otras dos en diciembre de 1785, bajo la reforma imperial de la masonería (el Freimaurerpatent, “Decreto Masónico”) del mismo mes y así Mozart llegó a pertenecer a una logia llamada Zur Neugekrönten Hoffnung (Nueva esperanza coronada).

Según los documentos masónicos que se han conservado, Mozart era bien recordado por sus hermanos masones y muchos de sus amigos también eran masones. La colaboración musical de Mozart con las logias masónicas comienza aún antes de ser iniciado masón, ya que buena parte de sus amigos y patronos pertenecían a la masonería.

Durante la visita a Viena en 1785, el padre de Mozart, Leopold, también se hizo masón.

Con motivo de la iniciación de Mozart, éste interpretó en la logia su cantata «A ti alma del Universo, OH Sol» (K. 429) en la que el aria del tenor es un himno al sol y a la luz; cantata doblemente adaptada a la celebración de la gran fiesta masónica de San Juan del verano (más conocida como del solsticio de verano) y punto culminante del año masónico; y que encaja igualmente en la ceremonia de iniciación del primer grado masónico, cuando el aprendiz, después de haber sufrido las pruebas simbólicas, recibe la luz.

Agradecido y apasionado por su Logia y con motivo de la ceremonia del paso de su padre al grado de compañero, puso música a un poema de Joseph Von Ratschky, «El viaje del compañero» (K 468) para canto y acompañamiento de piano.

Unos meses antes de acceder al tercer grado de la masonería, asistió el 11 de febrero de 1785, en la logia vienesa «La verdadera concordia», a la iniciación masónica de su amigo Joseph Haydn en el grado de aprendiz, y a quien Mozart, con este motivo, dedicó los «Seis cuartetos de cuerda».

Poco antes de la doble investidura que Mozart y su padre recibieron el 2 de abril de 1785 como maestros masones en la logia vienesa «La esperanza coronada», compuso para esta logia dos de sus más importantes composiciones masónicas: «La alegría masónica, (K 471) y la «Música fúnebre masónica» (K 477).

En 1786, con motivo de una reorganización de las logias vienesas ordenada por el emperador José II, Mozart compuso para su logia «La nueva esperanza coronada» dos cantatas masónicas: «Para la apertura de la logia» (K 483) y «Para la clausura de la logia» (K 484).

Nos encontramos todavía con tres obras de Mozart ligadas a la masonería, y en las que descubrimos a Mozart comprometido con la libertad y con los ideales de la Revolución Francesa, especialmente en «Vosotros los que honráis al Creador del Universo infinito» (K 619), que es un mensaje dirigido a la juventud alemana en el momento en que componía la ópera de la fraternidad universal.

Las otras dos composiciones estrictamente masónicas a las que Mozart puso música fueron una pequeña cantata masónica, «Elogio de la amistad» (K 623), fechada en Viena el 15 de noviembre de 1789), y «Enlacemos nuestras manos» (K 623a) y que se canta constituyendo la cadena de unión final de cualquier tenida masónica.

La historia y música de la ópera La flauta mágica, cuyo libreto escribe en colaboración con el también hermano masón Emanuel Schikaneder, es considerada por tener grandes influencias masónicas. De hecho, a pesar estar plena de guiños de la cultura popular, se puede seguir en ella el ritual de Iniciación masónica del Rito Zinnendorf. La obertura comienza con tres acordes similares a las denominadas “baterías masónicas” de diversos ritos. Asimismo, el tema toral de la obra; la lucha entre la luz y las tinieblas, es también el tema que atraviesa toda la enseñanza masónica.

Su obra póstuma, su canto de cisne, fue la que tituló «Pequeña Cantata Masónica», cuya audición dio en una tenida de su logia, dirigiendo él mismo la audición, dos días antes de sentirse atacado por la enfermedad misteriosa que le condujo al sepulcro.

En el cuadro adjunto se representa el interior de lo que es la casa de campo de Nueva Esperanza Coronada, en Viena. Mozart está representado en el extremo derecho, con ropa negra y espadín, sentado al lado de su amigo Emanuel Schikaneder (con ropa roja). Pintura al óleo, 1782.

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